Hace muchos años, cuando estaba en los últimos años de la secundaria, copié de algún lado un texto que en ese momento se ve que me llegó a tocar algo. Hace poco, revolviendo todas las chucherías y cachivaches que tengo almacenados, encontré la hoja manuscrita. Y como ahora tenemos algo llamada internet, lo busqué en la web para no transcribirlo.
Creo que lo que transmite es muy cierto, desde mi humilde punto de vista, y se los comparto a ustedes para que saquen sus propias conclusiones.
Abrazo!
OUR DEEPEST FEAR, by Marianne Williamson
Our deepest fear is not that we are inadequate. Our deepest fear is that we are powerful beyond measure. It is our light, not our darkness that most frightens us. We ask ourselves, Who am I to be brilliant, gorgeous, talented, fabulous? Actually, who are you not to be? You are a child of God. Your playing small does not serve the world. There is nothing enlightened about shrinking so that other people won't feel insecure around you. We are all meant to shine, as children do. We were born to make manifest the glory of God that is within us. It's not just in some of us; it's in everyone. And as we let our own light shine, we unconsciously give other people permission to do the same. As we are liberated from our own fear, our presence automatically liberates others.
y acá va "doblado al español", para el que no gusta de leer en inglishhh
Nuestro miedo más profundo no es que seamos inadecuados. Nuestro miedo más profundo es que somos poderosos más allá de cualquier medida. Es nuestra luz, no nuestro lado oscuro lo que más nos da miedo. Nos preguntamos a nosotros mismos: ¿quién soy yo para ser brillante, bello, con talento y fabuloso? En realidad, ¿Quién eres tú para no serlo? Eres un hijo de Dios. El hecho de que juegues a ser insignificante no le sirve de nada al mundo. No hay nada de iluminado en encogerse para que la gente a tu alrededor no se sienta insegura. Se supone que todos tenemos que brillar, tal como lo hacen los niños. Hemos nacido para manifestar la gloria del Dios que tenemos dentro. Y no, esto no está sólo en algunos de nosotros: está en todos. Y así cuando dejamos a nuestra luz brillar, inconscientemente estamos dando permiso a otros para hacer lo mismo. Y así cuando nos liberamos de nuestro miedo, nuestra presencia automáticamente libera a otros.
1 comentario:
muy bueno, realmente hoy me siento asi y es agradable que se puedan compartir estos pensamientos...
ha seguir iluminando el camino :-)
Publicar un comentario